viernes, 4 de diciembre de 2015

4 meses sin comer pescado

Así, casi sin darnos cuenta han pasado ya 4 meses desde que dejamos de comer pescado. Y, aunque tengo que reconocer que alguna vez he sentido la tentación de comerlo de nuevo, he sido fuerte!!
 


La verdad es que si tomas la decisión de ser vegetariano por el sufrimiento animal, no es fácil sentirte tan identificado con los peces. No sé dónde leí que esto se debe a que no les oímos. Posiblemente, si fuéramos capaces de escuchar su respiración entrecortada mientras se ahogan durante horas, sería diferente… Si escuchásemos a las almejas, mejillones, langostas, etc, gritar mientras los echamos vivos al aceite o agua hirviendo, quizá se nos movería la conciencia…
 


La cuestión es que sí, tengo que hacer un sobre-esfuerzo porque tengo momentos en que me apetece comer pescado y obligarme a pensar que son animales también, que sienten y que sufren.
 


A menos que seas vegetariano, pensarás que esto es absurdo. O quizá creas que ése es su destino ya que están para que nos alimentemos de ellos. Pero su sufrimiento no es la única razón por la que dejar de comer peces. Ésa razón es la que es válida para mí. Si crees que no es motivo suficiente para dejar de comerlo, a ver qué te parecen éstas:
 


Razón 1. Los plásticos
 


Si has leído mi post ‘El plástico. Esa comodidad¿necesaria?’ sabrás que no podemos reciclar todo lo que producimos y que el porcentaje del plástico que ni se recicla, ni se quema, va a parar al mar. Imagina esos restos de envases fabricados de un material que NO se degrada, flotando a la deriva, haciéndose cada vez más y más pequeños durante años. Esas micro partículas de plástico son confundidas con el plancton por los peces y acaban en sus estómagos. Estos peces, cuya carne ha estado en contacto con el plástico y que habrá absorbido Dios sabe qué sustancias nocivas, acaban en tu plato.
 


Así que si no te preocupas por los peces, al menos preocúpate por ti mismo. Si el pez lo ingiere, te garantizo que, de alguna manera, a ti también te llegan restos.
 


Razón 2. Piscifactorias
 


Según datos publicados por  FAADA (Fundación , para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales) en este post, en 2001, el 30% del pescado y marisco que se consume globalmente proviene de piscifactoría. Seguramente, a día de hoy, este porcentaje será mayor.
 


Los peces criados en piscifactorías suelen tener enfermedades que son tratadas con antibióticos, pesticidas y vacunas para evitar que se propaguen. Estas sustancias permanecen en su carne y no se llegan a eliminar totalmente. Dentro del informe, hay muchos más datos si estás interesado en ello.
 


Razón 3. Mercurio
 


Aparte de los peces criados en cautividad para el consumo humano (es increíble la poca sensibilidad que demostramos y qué egoísmo sin límites), también hay peces en estado salvaje.
 


Muchos de los peces grandes como el pez espada, el emperador, el atún, que viven en estado salvaje, contienen grandes cantidades de mercurio y, según demostró la organización ecologista Oceana (que tuvo que interponer una denuncia para que el informe se hiciera público - puedes leerlo en esta noticia de El País), en cantidades superiores a las permitidas por ley. Aclaremos que permitidas por ley no quiere decir que sea bueno para la salud. Los límites de la legalidad de algo suelen definirse con dinero. Este informe que salió a la luz tras la denuncia, era del Instituto Español de Oceanografía y, curiosamente,  al Gobierno no le interesaba que se publicara por calificarlo de alarmista.
 


Esto me hace cuestionarme, cuántos informes como éste habrá por ahí que no conocemos aún…
 


Lo único que tengo claro es que cada vez estoy más convencida de que voy por el camino correcto. Lo único que nos queda por dejar que proceda de un animal, son los huevos (de momento los consumimos camperos y con código 0 ó 1), pero ya tienen fecha de salida de nuestra vida: el 7 de enero. Después de las navidades y para no complicar más las comidas familiares porque preparados para dejarlos estamos más que de sobra ya.
 


Y vosotros, ¿qué es lo que comíais y que más echáis de menos o tenéis que hacer un esfuerzo extra para evitarlo?


 

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