Me preocupan los animales, me preocupa la salud y me
preocupa el medio ambiente. Y me preocupa lo poco que nos molestamos en
cuidarlo. Si miramos a nuestro alrededor, podemos darnos cuenta de que el mundo
que nos rodea es artificial. Lo único que se busca es la rentabilidad pero,
¿dónde queda el planeta? ¿Qué mundo queremos dejarles a nuestros hijos?
Una de las cosas que más me preocupan es el plástico. Es
sorprendente la cantidad de plástico que se usa en nuestro día a día y que, por
mucho que nos lo intenten hacer creer, no somos capaces de reabsorberlo. No, no
todo se recicla.